Recientemente llevamos a cabo un importante taller dirigido a padres, madres y apoderados para abordar una preocupación creciente en la formación de nuestros estudiantes, las consecuencias negativas del uso excesivo del celular.

El espacio se centró en una conversación abierta y necesaria, donde se contrastó la conducta observada desde el hogar con las dinámicas que vemos dentro del establecimiento. El objetivo fue unificar criterios y esclarecer los motivos por los cuales esta práctica resulta perjudicial.

Junto a los apoderados, se analizaron ejemplos concretos de las consecuencias directas de esta adicción digital. Se destacaron las dificultades en la concentración que conllevan al deterioro del rendimiento académico, así como el aislamiento social, la disminución de habilidades para la interacción presencial y los trastornos del sueño que contribuyen al aumento de la ansiedad juvenil.

El propósito principal fue entregar una visión clara y herramientas para que, tanto el establecimiento como las familias, puedan establecer límites saludables que protejan el bienestar y el desarrollo integral de nuestros jóvenes. Agradecemos la alta participación y el compromiso de nuestra comunidad.